Falleció a los 91 años el militante Gerardo Bavio

Falleció a los 91 años Gerardo Bavio, militante peronista y ex funcionario del Ministerio de Industrias de Cuba, a cargo de Ernesto Che Guevara. Fue intendente intendente en Salta durante el mandato del gobernador Miguel Ragone (desaparecido durante la dictadura), Bavio fue enterrado en Tucumán, en donde vivía desde hace unos años. falleció el viernes a la madrugada.
“Lo vamos a recordar con inmenso cariño siguiendo nuestra lucha como se recuerda a los compañeros”, dijo Nora Leonard, otra militante salteña por los Derechos Humanos y adhirió a las palabras que pronunció otro militante que indicó “perdemos un revolucionario, viva la revolución. Gerardo vive. Hasta la victoria siempre”. Bavio nació en Salta el 23 de febrero de 1926. Se recibió de ingeniero civil en la Universidad de Córdoba. En 1962 fue contratado por el Ministerio de Industrias de Cuba, a cargo de Ernesto Che Guevara. A principios de los ´70 militó en la organización Montoneros.
El 25 de mayo de 1973 es designado Intendente de la ciudad de Salta. Fue detenido durante la gestión de Isabel Perón. Liberado en febrero de 1975 constituye la Junta Promotora del Partido Peronista Auténtico. Dado el golpe genocida permanece en Argentina hasta mayo de 1978. Parte al exilio en México, allí suscribe un documento crítico a la conducción de Montoneros junto a Jaime Dri y Miguel Bonasso, entre otros. En 1990 regresa a Argentina. En 2008 es nombrado Profesor Honorario de la Universidad Nacional de Salta. Su libro último fue “El peronismo que no fue. La otra historia”. "Gerardo era un auténtico militante de la vida... pura bonhomía y enorme humanidad. Un eterno joven" escribió José Vitar, político de larga trayectoria. "Me quedo con el recuerdo de Gerardo sentado en el salón de actos de la FOTIA en noviembre del año pasado cuando Alicia Castro (nuestra ex embajadora en Londres) vino a darnos una charla sobre Malvinas. Cuando destaqué su presencia, una larga ovación pobló de cálidos y afectuosos aplausos esa noche militante. No había quien no sintiera un enorme afecto por ese ser excepcional". Recordó Vitar y cerró: "Querido Gerardo, hasta la victoria siempre..."