La Chacarera cerró su fiesta imponente en la Plaza Añoranzas de Santiago del Estero

Por El Diario 24 — 1 de enero de 2010 en Argentina
La Chacarera cerró su fiesta imponente en la Plaza Añoranzas de Santiago del Estero

El festival de la Chacarera terminó en la mañana de este domingo, luego de una noche cargada de la mejor música de Santiago del Estero. Orellana Lucca y el Vislumbre fueron lo más destacado de una propuesta que, a quienes gustan de este tipo de música, dejó totalmente satisfechos. En el parque Aguirre, en cercanías de la renovada plaza Añoranzas, no cabía un alfiler. Muchos aprovecharon la enorme potencia de los parlantes, para sentarse en la costanera, mesita, cervezas, papas fritas y sillones, a disfrutar de la fresca noche, la alta luna y la buena música. Las Sachaguitarra Atamisqueñas, Juan Saavedra, Soles y Luna, La Surreña, Raúl Ibarra, Los Shunkos, Zurdo López, Danza Así, Don Sixto, Los del Río, La Greda, Los del Corazón, Jarana Negra y Mosoj Ñaupa, fueron algunos de los grupos que dieron vida al Festival de la Chacarera, en una segunda noche que no escatimó ni las nostalgias, cuando se cantaron las más recordadas composiciones santiagueñas de este género ni el asombro por las novedades que trajeron los músicos desde los cuatro puntos de la más extensa de las provincias del norte. El festival se apreció en cada rincón del planeta, por una transmisión por el sistema streaming, a través de internet. De esta manera, los santiagueños repartidos en los más diversos puntos del país y el mundo, así como los entusiastas del más santiagueño de los festivales, siguieron sus instancias a través de su página de fanáticos (Fan page, para los que saben hablar el inglés). Con la magia que le dieron desde su origen sus creadores, el Festival Nacional de la Chacarera se realiza con todo su embrujo a orillas del río Dulce. Las melodías del bosque convocan a miles para iniciar el calendario de fiestas populares de la Argentina desde una de las provincias en que las tradiciones se viven de una manera especial, tanto los lugareños como los turistas que llegan desde todo el país y allende sus fronteras para danzar y cantar bajo el firmamento santiagueño.