Equinoccio de Otoño 2020 y el anuncio de los buenos tiempos

Desde que el mundo es mundo, el equinoccio de otoño llega puntualmente a darle la razón a Albert Einstein, que sostenía: “Dios no juega a los dados con el Universo” (si no fue él quien la dijo, no importa, es bonita y está bien,  por eso hay leyes estrictas que lo rigen). Entre hoy y el 21 ó 22 de marzo, aquí y al otro lado de la Tierra, el día dura lo mismo que la noche. Allá con el equinoccio de la primavera, que augura un calorcito que quizás les mate los bichos, aquí con el frío que quizás los active aún más.También desde antes de que Adán y Eva poblaran el Paraíso, en verano y otoño los días se acortan y en invierno y primavera se alargan (y vengan de a uno a discutírmelo, si quieren). La cuestión es que los días, las jornadas, las  fechas y los plazos nunca están quietos, siempre moviéndose, llevándonos hasta el final, cuando el Sol se convierta en una estrella enana. Pero falta un tiempito para eso, dicen que podría ocurrir en 10 millones de años, décadas más, décadas menos.Como es el justo medio, también aquí, digo, en el norte de la Argentina, el otoño que comienza en apenas unas horas, viene a ser el mejor tiempo del año. Está siempre algo húmedo, las hojas de los árboles siguen verdes y empezarán a perder su colorcito recién cuando se avecine el invierno. Y  sobre todo hay un clima muy agradable, de noche campera para los más friolentos y de siesta un sol que pica, pero no molesta.Y todo el Cielo para disfrutar, mientras la vida pasa.©Juan Manuel Aragón          Leer más notas de Juan Manuel AragónTags

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