No confíes ni en tu match: el estafador de Tinder las prefiere con criptomonedas

El “Estafador de Tinder” se ha posicionado como uno de los títulos en Netflix y causó gran conmoción entre el público. Realmente la tecnología llegó para quedarse y puede brindarte ayuda en cosas que parecen tan sencillas y personales como encontrar el amor. Sin embargo, también es muy sencillo esconder tus verdaderas intenciones y ese fue el fuerte de este estafador. Aunque la historia de Simon Leviev parezca increíble y que el verdadero desenlace no haya sido tan satisfactorio, aun debes cuidarte. En los últimos meses, varios internautas han denunciado que hay grupos de estafadores que utilizan las apps de citas para robar dinero. Pero, ahora hay un giro, los caballeros las prefieren con criptomonedas.

Este es el caso de CriptoRom, una de las maneras más discretas de robar dinero que puede generar fraudes millonarios. Según la compañía de ciberseguridad Sophos, se ha alertado a todos los usuarios por una red de estafas internacionales que se ha cobrado cientos de miles de dólares en criptomonedas. A continuación, te contamos de qué se trata la estafa para que no caigas en ella. Primero, este fraude puede afectar a usuarios con iPhone y Android indistintamente, así que el sistema operativo de tu dispositivo no te salvará. Además, hay que destacar que no solo se da a través de Tinder, pues se ha llevado a cabo mediante otra app de citas llamada Bumble. El modus operandi es el siguiente: el usuario se crea un perfil bastante convincente para crear un vínculo emocional con la persona detrás de la pantalla.

Cuando consiguen ganarse la confianza, te invitan a sumarte al mundo de las criptomonedas a través de una página web de trading, que resulta ser falsa. Lo anterior lo hemos visto una y otra vez, alguien que te convence de que ha ganado mucho dinero invirtiendo poco. Pero, en esta oportunidad no se trata de una estafa piramidal, sino que luego de comprar dentro de la plataforma, los fondos desaparecen y la solicitud de acceso es rechazada.